Relación entre el estrés térmico y la productividad en entornos laborales

El estrés térmico es la respuesta fisiológica del cuerpo humano a condiciones ambientales de calor excesivo.

El estrés térmico ocurre cuando el cuerpo no puede regular su temperatura interna de manera efectiva debido a las condiciones ambientales de calor excesivo, a menudo combinado con alta humedad, radiación solar, y esfuerzo físico intenso. Esta condición puede tener un impacto considerable en la salud, el bienestar y, consecuentemente, en la productividad de los colaboradores.

Mecanismos por los cuales el estrés térmico afecta la productividad:

  • Disminución de la capacidad física: El calor excesivo provoca fatiga, debilidad muscular, calambres y agotamiento, lo que directamente reduce la capacidad de los trabajadores para realizar tareas físicas de manera eficiente y sostenida.

  • Deterioro de la función cognitiva: El estrés térmico afecta la concentración, la memoria, la toma de decisiones y el estado de alerta. Esto lleva a un aumento de errores, disminución de la eficiencia en tareas que requieren atención mental y un mayor riesgo de accidentes.

  • Aumento de la incomodidad y la distracción: Las condiciones de calor extremo generan malestar físico, irritabilidad y dificultad para concentrarse en las tareas, lo que disminuye la motivación y el rendimiento laboral.

  • Mayor ausentismo: El estrés térmico puede causar enfermedades relacionadas con el calor, como golpe de calor, agotamiento por calor y deshidratación, lo que resulta en un aumento del ausentismo laboral y una menor disponibilidad de personal.

  • Reducción del ritmo de trabajo: Como mecanismo de autoprotección, los trabajadores tienden a disminuir su ritmo de trabajo en condiciones de calor para evitar el sobrecalentamiento, lo que inevitablemente reduce la producción general.

  • Impacto en la salud a largo plazo: La exposición crónica al estrés térmico puede contribuir a problemas de salud más graves, afectando la capacidad laboral a largo plazo.

Evidencia de la relación:

Numerosos estudios han demostrado la correlación negativa entre el aumento de la temperatura y la productividad en diversos sectores, incluyendo la agricultura, la construcción, la manufactura y hasta en entornos de oficina. Se ha encontrado que incluso aumentos modestos en la temperatura pueden llevar a una disminución medible en la producción y un aumento en los errores.

Estrategias para mitigar el impacto del estrés térmico en la productividad:

Implementar medidas para reducir el estrés térmico en el lugar de trabajo no solo protege la salud de los empleados, sino que también ayuda a mantener e incluso mejorar la productividad. Algunas estrategias clave incluyen:

  • Controles de ingeniería: Mejorar la ventilación, instalar sistemas de aire acondicionado o enfriamiento evaporativo, utilizar pantallas o barreras para reducir la radiación de calor, aislar fuentes de calor.

  • Controles administrativos: Ajustar los horarios de trabajo para evitar las horas más calurosas del día, programar tareas más pesadas para las horas más frescas, implementar pausas de descanso frecuentes en áreas frescas y sombreadas, rotar tareas para reducir la exposición individual al calor.

  • Prácticas de trabajo: Fomentar la hidratación constante proporcionando agua fresca y electrolitos, promover el uso de ropa de trabajo ligera y transpirable, implementar un sistema de aclimatación gradual para los trabajadores nuevos o que regresan después de un período de inactividad.

  • Capacitación y concienciación: Educar a los trabajadores y supervisores sobre los riesgos del estrés térmico, los síntomas de las enfermedades relacionadas con el calor y las medidas preventivas.

  • Monitoreo y respuesta: Implementar sistemas de monitoreo de las condiciones ambientales y la respuesta fisiológica de los trabajadores (cuando sea apropiado), establecer protocolos claros para identificar y tratar los casos de estrés térmico.

En resumen, el estrés térmico representa un riesgo significativo para la productividad en los entornos laborales. Comprender esta relación y aplicar estrategias efectivas de mitigación es crucial para proteger la salud de los trabajadores y asegurar un rendimiento laboral óptimo, especialmente en regiones con climas cálidos como San Pedro Sula, Honduras.

En laboratorio ECOQUIMSA, conscientes de la importancia de este tema relacionado con la salud ocupacional, tenemos implementado el monitoreo de Estrés Térmico por Calor basado en la determinación del Índice de Temperatura de Globo y Bulbo Húmedo - WBGT por sus siglas en inglés-. En cumplimiento con el artículo 338 del Reglamento General de Medidas Preventivas de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales – Acuerdo Ejecutivo No. STSS-053-04, las empresas deben realizar la evaluación del riesgo de estrés térmico con ésta metodología del cálculo del índice WBGT.

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